Una de las fiestas más importantes de la Iglesia es la Solemnidad de Corpus Christi, la cual se celebra 60 días después del Domingo de Resurrección.

Esta festividad surge en el s.XIII en Bélgica de la mano de Santa Juliana de Mont-Cornillon en la Abadía de Cornillón. La idea era presentar la Eucaristìa en honor al Cuerpo y la Sangre de Cristo para que los fieles pudieran adorar su presencia. Durante los años sucesivos esta fiesta se fue extendiendo en Europa. El 8 de septiembre de 1264 fue instituida por el Papa Urbano IV, mediante la bula Transiturus hoc mundo. Posteriormente arribaría a Latinoamérica. Hoy Corpus Christi es considerada una de las tres fechas más importantes del año litúrgico. 

Miles de fieles en diferentes partes del mundo participan activamente en las procesiones y festividades que llevan adelante sus comunidades. Sin embargo este año, las clásicas celebraciones tendrán una variante, el aislamiento social debido al covid-19.

Este sentimiento de jubileo por el cuerpo y la sangre de Jesús se hace presente cada año en España en la ciudad de Sevilla que ha mantenido la fiesta en día jueves. Tradicionalmente, días previos a la gran celebración, todas las cofradías de la ciudad junto con las instituciones católicas y colegios preparan arreglos florales y visten la Catedral. Durante los días de la infraoctava, se celebran funciones de música y danzas en presencia del Santísimo Sacramento solemnemente expuesto. Una de las cosas más llamativas de la gran fiesta sevillana es el olor a juncia y romero, con cuyas ramas se cubre el suelo donde efigies de santos locales, orquestas, desfiles militares y miles de fieles realizan los famosos nueve pasos junto a la imponente custodia. Este año la Archidiócesis de Sevilla, por disposición de la Santa Sede, ha decidido suspender la procesión y se encuentra estudiando la alternativa de programar dicha fiesta para mediados de septiembre. 

En América Latina, Corpus Christi no pasa desapercibido. En Perú, por ejemplo, la piedad popular cusqueña se manifiesta en una estallido de color, música y danza, producto del sincretismo religioso entre la fe católica y la religiosidad andina de la época de los incas. Diez días antes de la festividad, la patrona del Cusco, la Virgen de Belén, sale junto a San José en procesión rumbo a la iglesia de Santa Clara, donde esperan la llegada de otros santos. Allí las imágenes descansan 8 días, donde, según la creencia popular, "debaten" sobre los destinos de la ciudad. Pasado ese tiempo, tras despedirse entre sí con una reverencia, salen en procesión de despedida, en el mismo orden, dan vuelta a la Plaza de Armas y se retiran a sus templos hasta el próximo año, esto se conoce como el retorno de los santos. En este particular 2020, debido a la propagación del COVID-19, los ceremonias de la Ciudad Imperial se vivirán de manera virtual a través de plataformas de redes sociales mientras que los espectáculos serán promovidos mediante videos. 

Otra llamativa fiesta de Corpus Christi se da en China donde se puede ver, en esta fecha, a centenares de fieles hacer la tradicional procesión en diferentes parroquias. Dada la rigurosa carga laboral, se escoge celebrar directamente el día domingo y no así el jueves. Si bien el número de católicos en China no es mayoría, la concurrencia a la procesión eucarística, el cual suele ser acompañado por seminaristas y religiosas, que se lleva a cabo cada año en Pekín, es digna de mencionar. 

Este 2020, el Santísimo Sacramento permanecerá en los templos y no saldrá a las calles, sin embargo, nos acompañará desde donde esté, se hará presente en nuestros hogares y nos brindará su protección y amor como lo hace cada año.

 

Este año en Argentina, se realizará la Celebración del Corpus Christi desde la Catedral de Buenos Aires que se podrá ver a través de Canal Orbe 21.

A continuación los invitamos a conocer los horarios para poder participar desde sus hogares:

 

Estreno: Sábado 13 de Junio, 16:00h

Repite: Domingo 14 de Junio, 08:00h y 19:00h

 

Podés verlo en vivo haciendo click aquí